Dos pasos importantes para la Sanidad Matrimonial

Si hay heridas en tu relación de pareja…

Si tu pareja te ha hecho sentir una persona avergonzada o despreciada,

Si hay desgaste en la relación, si sientes un enfriamiento en el amor… o

Si deseas que tu vida de pareja mejore…

Si anhelas un matrimonio de plenitud y en crecimiento sin límites, esta reflexión puede ser la clave para ti y tu cónyuge.

 

Ten presente que todas las instrucciones para que nos vaya bien en la vida, las instrucciones para dar en el blanco e ir de acierto en acierto, de victoria en victoria, las ha dado Dios, el Creador de todas las cosas y están al alcance de todos en las Escrituras, en la Biblia.

 

Veamos entonces dos pasos para la Sanidad Matrimonial…

 

Filipenses 3:13-14 // “13 Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante, 14 prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús.”

 

El primer paso se encuentra en esta instrucción: Olvidando ciertamente lo que queda atrás…

La mayoría de las personas hemos buscado a Dios cuando estuvimos en alguna dificultad seria, cuando ya nuestras fuerzas eran pocas o casi ningunas. En general las personas buscamos ese verdadero encuentro, ese conocimiento del verdadero Dios, del Creador de todas las cosas cuando estamos en la mala. Muchos buscamos una relación con Dios en esas condiciones y luego continuamos cultivando la comunión diaria con el Creador, y otras personas cuando las cosas mejoran se enfocan en otras actividades u objetivos. En fin… por lo general las personas han venido al camino del Evangelio muy heridas. Pero no solamente hay personas heridas, sino que también hay matrimonios muy lesionados. Y aún algunos se han lastimado entre sí ya siendo creyentes, estando ya en los caminos de Cristo.

 

Hay matrimonios que han sufrido por diversos motivos como:  Incomprensión #  Incompatibilidades (sexuales, culturales, de familias de origen,  y otras)  #   Falta de paciencia   #  Intolerancia   #  Falta de comunicación o formas erradas de comunicarse  #  Falta de un proyecto conjunto   #  Infidelidades matrimoniales   #  Griterías  # Violencia física   #  Violencia moral   #  Abusos, Violaciones  #  Echarse la culpa mutuamente por los fracasos  #  Etc., etc., y así podríamos continuar con la lista de motivos o situaciones que han provocado diversidad de heridas en las personas. 

 

Todo esto trae indefectiblemente un desgaste de la relación y un enfriamiento en el amor, y hasta la muerte del amor. Y en algunos casos el primer amor, termina convirtiéndose en rechazo y hasta odio…  (dice el refrán popular que “del amor al odio hay un solo paso”).

 

Mira, si estas pasando o has pasado por una situación de las mencionadas anteriormente, o cualquier otra situación que te afecta personalmente o aun afecta tu relación de pareja, la Buena Noticia es que Dios quiere Sanarte totalmente. Dice Mateo 9:12 “Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos.” Y cualquier herida del alma, enferma.

Cuando este tipo de experiencias están ocurriendo o han pasado en el matrimonio, dejan heridas, dejan recuerdos imborrables. Esos recuerdos se transforman en resentimiento, rechazo y sed de venganza (aún dentro de los matrimonios cristianos).

 

Dios tiene poder para sanar cualquier herida en tu matrimonio. Pero Él no lo va a hacer solo, sin la ayuda de ustedes, no lo va a hacer sin tu permiso, sin tu pedido.

Toda persona, toda pareja en dificultad, en crisis, toda pareja que se ha herido, debe entender que Dios ya hizo lo que tenía que hacer, que ahora el siguiente paso hacia la sanidad lo deben dar ustedes mismos, y ese paso que hace falta es poner la fe en marcha. Dice la Escritura, la Palabra de Dios en Santiago 2:26 “Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras está muerta.”

 

Ahora bien… Tú puedes estar pensando, o decirme:   -   Pastor usted no sabe lo que este hombre o esta mujer me ha hecho. Lo mucho que me ha hecho sufrir.  Yo me prometí a mí mismo, a mí misma que nunca iba a olvidar y que nunca lo iba a perdonar, nunca la iba o perdonar….

 

-  Ahora deja que te diga… que hoy es el día de perdonar y es el día de dejar atrás.

 

Veamos que dice Dios en Su Palabra, Hebreos 10:16-18 // “16 Este es el pacto que haré con ellos después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes (mis instrucciones de vida) en sus corazones, y en sus mentes las escribiré, 17 añade: Y nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones. 18 Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.”

Dios perdona y olvida…

 

En el pasaje anterior está desarrollada una técnica que podemos denominar como “Técnica de reemplazo de pensamientos” que consiste en reemplazar los pensamientos negativos por pensamientos positivos, estableciendo una nueva manera de pensar, a través de estos “pensamientos de reemplazo”, fundado esto en las instrucciones de vida que Dios nos ha dado en Su Palabra. Veamos esto en Filipenses 4:8 “Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad.”

(esta nueva manera de pensar es una de las metas hacia las que me proyecto, esto es hacia donde me extiendo… recordemos Filipenses 3.13 y 14 que vimos al principio).

 

Si Dios ya perdonó a tu esposo/a, y tú todavía no la has perdonado, acaso ¿tú te crees más que Dios?   ¿Con qué derecho sigues recordando un pasado perdonado?    ¿Sabes sobre quien cargó Dios el pecado de tu compañero/a?... ¿lo sabes?

Veamos lo que dice la Escritura en Isaías 53:4-6 /// “4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. 5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. 6 Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; más Yahweh cargó en él el pecado de todos nosotros.”

 

¿A quién te parece que estás juzgando cuando crees que estás juzgando a alguien cuyo pecado ya fue remitido, ya fue perdonado?

No cometas el error de estar juzgando a Jesucristo… 

 

Tal vez pienses “oh no ¿porque haría una cosa así?    Míralo de esta forma. Si estas juzgando a alguien por un pecado del pasado, Dios ya cargo ese pecado en Jesucristo, en Yahshua el Mesías, en Su Unigénito.  Lógico si es creyente y hubo arrepentimiento.

 

Leímos en Hebreos 10:18 “Pues donde hay remisión de éstos, no hay más ofrenda por el pecado.” Por lo tanto, piensa en esto… ¿Qué es lo que le quieres hacer pagar a tu marido o a tu mujer? Ya sé que cuando te la hizo, tu dijiste “a ésta tarde o temprano me las va a pagar”.

Sin embargo, ten presente que Yahshua el Mesías, a quien conocimos como Jesucristo ya pagó por él, ya no es necesaria ninguna ofrenda por el pecado, no es necesario pagar ningún precio, porque el precio ya ha sido pagado. Solamente es necesario un genuino arrepentimiento, y pedir perdón de todo corazón. Y tú debes perdonar. Tu deber delante del Señor es perdonar, y el obrara en tu vida sanando toda herida del pasado.

 

¿Y qué pasa si llegáramos a cometer algún error nuevamente?

1° Juan 2:1 “Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.”

Si alguno hubiere pecado: abogado tenemos para con el Gran Juez, a si propio Hijo.  Entonces pidamos perdón a Dios y a nuestro cónyuge, y seremos perdonados.

 

El segundo paso, para la Sanidad Matrimonial se encuentra en la instrucción:  Extendiéndome a lo que está delante, prosigo a la meta, al premio.

 

Hebreos 12:1-2 //  “1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, 2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.”

 

Hay una gran nube de testigos que, aunque no nos demos cuenta están pendientes de si caemos o estamos en pie. Que quieren probar si la fe en nuestro Señor Jesucristo, en Yahshua el Mesías es verdad o es mentira.

Los primeros y principales testigos de tu comportamiento son tus propios hijos.

Por lo tanto, siguiendo la instrucción del Señor, despójate de todo peso y del pecado del pasado, y corre con paciencia la carrera que tienes por delante, puestos los ojos en Jesús, en Yahshúa.

 

No olvides que Él menospreció el oprobio, la vergüenza, la degradación y por eso se sentó a la diestra del trono de Dios.

¿Tu pareja te ha causado oprobio, tu pareja te ha hecho sentir una persona avergonzada, despreciada? Olvida eso y siéntate en los lugares celestiales juntamente con Cristo.

 

La mayoría de las veces el problema más grande que impide, una verdadera sanidad en el matrimonio es “el orgullo”. Por eso la instrucción del Creador, a nuestro alcance en la Biblia nos enseña a humillarnos. Veamos 1° Pedro 5:6 – 7 // “6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo, 7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.”

 

El Señor tiene cuidado de sus hijas, de sus hijos, echa sobre Él toda ansiedad, toda vergüenza, toda herida de tu relación de pareja, despójate de todo peso y del pecado del pasado, y corre con paciencia la carrera que tienes por delante, puestos los ojos en Jesús, en Yahshúa.

Deja que Él sane todas tus heridas, que sane tu matrimonio que sane tu familia, y vive la Vida de Plenitud que Él ha diseñado para ti.

 

Repasemos los dos pasos:

 

Primer paso, olvida lo que queda atrás… es tiempo de perdonar y renovar los pensamientos, pensar en todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre.

Es necesario un genuino arrepentimiento, pedir perdón de todo corazón, perdonar de todo corazón. Tu deber delante del Señor es perdonar, y el obrara en tu vida sanando toda herida del pasado.

 

Segundo paso, extenderte, proyectarte a lo que está delante, y proseguir a la meta, al premio.

Despójate de todo peso y del pecado del pasado, y corre con paciencia la carrera que tienes por delante, puestos los ojos en Jesús, en Yahshúa.

Recuerda que los primeros y principales testigos de tu comportamiento son tus propios hijos, atentos para probar si la fe en Jesucristo, en Yahshua el Mesías es verdad o es mentira.

 

Permanece en Cristo, permanece en la Palabra de Dios, en sus instrucciones de vida, Yahshua es la Palabra hecha carne. No permitas que ningún engaño del diablo, que ninguna mentira, que ninguna doctrina de hombre interfiera en la sanidad de tu relación matrimonial, en el camino de Plenitud que Dios tiene para ti y tu matrimonio.

 

Si sientes la necesidad de conocer las instrucciones de Dios para que tu vida de en el blanco, si sientes la necesidad de permanecer en comunión con el Señor, de estar preparado/da para las presiones que ya está viviendo el mundo, y de estar preparado para lo que vendrá, de hacer las cosas como Dios lo ha establecido...

¡Bienaventurado/da! ¡Dichoso/sa!

 

Los que servimos en Comunidad de Fe de Villa Santa Cruz del Lago, y cada una de las demás Comunidades de Fe, integrantes de Ministerio Bíblico Internacional, NO cambiamos Palabra de Dios, sino que, con sinceridad, como de parte de Dios, y delante de Dios, hablamos en Yahshua el Mesías, a quien conocimos como Jesucristo, y damos de gracia lo que de gracia hemos recibido…

Hay mucho por saber y una vida de plenitud por vivir, pero también, la hora de prueba está muy cerca…

 

Te invitamos, te animamos a que busques y recibas diariamente el alimento de la Palabra de Dios, para crecer y recibir fortaleza, dirección y cuidado, experimentar una vida matrimonial de plenitud, aun en medio de las circunstancias adversas del tiempo que estamos atravesando.

 

La Biblia es No un libro antiguo… es el más vigente de todos… allí están todas las instrucciones para alcanzar y experimentar cada día la vida de plenitud que anhelas…

 

Te invitamos a participar de nuestro tiempo de reflexión en las instrucciones de Dios para que nuestras vidas den en el blanco, te invitamos a nuestro tiempo de edificación mutua, también un tiempo de oración por tus necesidades, en el Salón de Comunidad de Fe de Villa Santa Cruz del Lago, calle Los Eucaliptos equina Candonga. (ver días y horarios actualizados de actividades)

 

Pero además te invitamos a ver las reflexiones, enseñanzas y estudios de las distintas Comunidades de Fe, la Facultad Bíblica, el Canal Retorno.TV, o a escuchar por Radio desde Fundación Hablemos de la Vida, a las que puedes acceder desde nuestra página en la solapa de (actividades) encontraras los links y veras los días y horarios de cada momento de reflexión y estudio. Todas totalmente gratuitas, aquí no se piden ofrendas, ni diezmos, ni dinero bajo ningún concepto, nuestro anhelo es que conozcas al único y verdadero Dios, al Dios de la Biblia, a través de la Biblia, y que andes en sus caminos, en sus instrucciones, que crezcas y te desarrolles, vivas bajo Su cuidado y protección y que experimentes una vida de plenitud en todo tiempo.

 

Si aún no escuchaste o leíste nuestras publicaciones anteriores te invito a verlas, en nuestra web, de igual modo si deseas repasar alguno de los temas, en el momento que tengas disponible, ingresando en (reflexiones)

 

 

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Que el Todopoderoso, el único y verdadero Dios, Creador de todas las cosas, guíe cada uno de tus días, guarde tu vida y la de los tuyos, y envíe las más grandes bendiciones

 

 

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